Confío en un nuevo amanecer, anunciado también por quienes desde otras latitudes sumaron sus votos con la esperanza de un país donde mis sobrinas, mis hijos por venir (cuando encuentre con quién), y todos quienes habitamos o extrañan esta noble tierra, podamos vivir con la paz y el progreso que merecemos.

El cambio no será de un día para otro, tomará tiempo y podrá doler, pero el camino, un gran camino comienza con un paso. Confío en que las sonrisas y las lágrimas que vi esta mañana se traduzcan en entusiasmo y constancia para que el cambio continúe desde cada uno de nosotros, porque es allí desde donde se hará posible! Claro, será más fácil con lo que adolescemos ahora: una administración honesta, cargos por mérito y no por adulación, aplicación justa de las leyes, respaldo e impulso a la producción nacional, resguardo de la identidad e integridad de nuestros organismos, verdadero aprovechamiento de los inmensos potenciales de Venezuela (turismo, agro, industria, deporte, cultura); dignificación de hospitales, escuelas y cárceles; consistencia ante el combate de la violencia y la corrupción, alianzas progresistas. Porque es verdad, no son carencias nacidas hace 14 años, pero que en ese mismo tiempo, con todo el poder y todo el dinero, sencillamente no quisieron atender.

 Sigo confiando. Mientras tanto, seguirán los cubanos, los boliburgueses, los violentos, los chinos, los damnificados, las expropiaciones, los elefantes blancos, las focas rojas, los ideales trasnochados, los mediocres aduladores, los hospitales sin insumos, las cárceles con hacinamiento inhumano, las persecuciones, los presos políticos, los chanchullos, los cierres de canales disidentes, la soberbia, la prepotencia, la confrontación, la descalificación, la división, el despilfarro de petrodólares, la venta y desaparición de las reservas nacionales, los regalos a países oportunistas, la desidia industrial, las promesas incumplidas, los exiliados, los perseguidos, la delincuencia desatada, la impunidad, y los mantenidos que, agradecidos con las limosnas, nos suman infelizmente al club de Cuba, Libia, Korea del Norte... A quienes me adversan, dudo que en 6 años corrijan lo que tenemos desde los últimos 14. Disfruten la circunstancia, sabiendo que nada es eterno. A quienes me acompañan en la disidencia, fortaleza y dignidad.

La diferencia la marcó el miedo infundido "te van a quitar las misiones" y la tardía acción de la oposición en atender a quienes el gobierno tiene hipnotizados. Ahí está la diferencia!!! Pero se aprende, se corrige, se actúa y se conquista!!! La otra diferencia está en sentarse a llorar y seguir lamentándose o en levantarse y continuar! Somos 6 millones que seguiremos de pie ante 7 millones que continúan arrodillados! Poco más de un millón, poco más de 10%, sólo eso, sólo eso! No podemos hablar de pérdida, sino que para la conquista falta un poco más! Lo que a Capriles le tomó 8 meses, el Gran Farsante ha tenido que dedicar aaaaaños de su vida, desde que era cadetico, y muchos, muchos petrodólares y violencia! Entonces? Se van a desanimar?!!! NO!!!! Resiliencia y conquista!!!!!

 No será fácil, no será rápido, y es ley natural, después de la tormenta viene la calma, y un nuevo amanecer!